Aunque las técnicas de control de roedores varían entre distintos sectores, y cada uno tiene su preferida, la realidad indica que una sola técnica no es adecuada en la mayoría de los casos y generalmente se requiere una combinación de éstas para lograr un resultado eficiente.
Los distintos métodos se pueden clasificar en tres categorías generales que son: físicos, biológicos y químicos:
Los distintos métodos se pueden clasificar en tres categorías generales que son: físicos, biológicos y químicos:
- Métodos físicos: Este es uno de los métodos más antiguos y populares. Consiste en el uso de trampas para atrapar a los roedores y aunque no implica gran costo a nivel material, sí lo hacen en términos de tiempo y mano de obra. Los resultados en términos de reducción de las poblaciones de roedores son virtualmente nulos.
- Métodos biológicos: Es uno de los temas de mayor interés entre investigadores, ya que implica utilizar métodos como la introducción de predadores, enfermedades o parásitos, modificación del hábitat, manipulación genética y variedades resistentes de cosechas para acabar con la población de roedores.
- Métodos químicos: A través de estudios, se ha comprobado que el método más efectivo es el uso de rodenticidas, divididos en dos categorías: los agudos o de acción rápida y los crónicos, que actúan lentamente después de varias dosis. Su presentación puede ser en cebos, cereales u otros materiales.